La Superintendencia de Servicios Públicos Domiciliarios advirtió serias dificultades en la aplicación del nuevo marco tarifario de aseo en los municipios del país cuyas autoridades locales no han cumplido con la actualización del Plan de Gestión Integral de Residuos Sólidos (PEGIRS).

De los PGIRS depende la determinación de los costos del servicio de aseo que debe hacer cada prestador; así como la debida aplicación de tarifas al usuario y la viabilidad del aprovechamiento de residuos. Esto de acuerdo con el nuevo marco tarifario expedido por la Comisión de Regulación de Agua Potable y Saneamiento Básico  -CRA-, de obligatorio cumplimiento desde el pasado 1 de abril.

En este plan los entes territoriales deben determinar los parámetros de calidad y las variables básicas de cada una de las actividades que los prestadores del servicio deben realizar. Así mismo, esta información es necesaria para el cálculo de los costos y posteriormente las tarifas que se cobran a los usuarios.

"Sin esta información, los prestadores no cuentan con los parámetros necesarios para identificar las cantidades y condiciones de algunos componentes del servicio de aseo y por lo tanto su ejecución no estaría asegurada económicamente y los prestadores no podrían realizar estas actividades pues la gratuidad del servicio no está permitida, poniéndose en riesgo la calidad, cobertura y oportunidad del mismo", señaló Jorge Andrés Carrillo, superintendente delegado para Acueducto, Alcantarillado y Aseo.

De acuerdo con la información suministrada por los prestadores, no se han podido definir los kilómetros a barrer, las áreas públicas a lavar, el inventario de árboles a cortar y de césped a podar en áreas públicas, y los requerimientos de cestas; entre otras variables, de las cuales depende la elaboración de los estudios de costos para la prestación del servicio.

La superintendencia evidenció que, a la fecha, de los 1.102 municipios sólo 217 han reportado ante la entidad el PGIRS. El plazo para hacerlo venció el pasado 30 de abril.